Un cuento de Guia Risari
Éste es un cuento perfecto para trabajar, con los más pequeños, las partes del cuerpo y los sentidos a través de una historia sencilla en la que un puntito, que nace en una hoja en blanco, va creciendo y se va transformando en un niño, en su afán por descubrir las cosas bellas que le rodean. ¡Se inventa la nariz, las piernas, la boca y los brazos para explorar el mundo!
Actividad recomendada:
A partir de los 18 meses tu hija o hijo ya comenzará a reconocer algunas partes del cuerpo. Leerles cuentos como éste y desarrollar una actividad posterior será un aporte para su normal desarrollo psicomotor.
Después de compartir "Aquiles el puntito" sugiere que lean de nuevo el cuento, esta vez invitando a tu hijo o hija a indicar dónde están las partes del cuerpo que se van nombrando. Tras eso, invítalo a recordar para qué sirven cada una: Aquiles crea sus piernas para explorar; invita a tu hijo a caminar por la habitación con la consigna "Las piernas nos permiten movernos"; invita a tu hijo a mirar por la ventana con la consigna "los ojos nos permiten ver el mundo" y que te cuente qué es lo que ve. Invítalo a tomar objetos diferentes, "las manos nos permiten coger las cosas que queremos y saber si son blandas, duras, ásperas, suaves"¿cómo es lo que tocas?. Invítalo a saborear algo, "la boca nos permite conocer el sabor de las cosas, si es dulce o salado". Invítalo a usar su nariz para olerte a ti, tu piel, y oler algunos alimentos "la nariz nos permite conocer el aroma de las cosas".
Motivados por Aquiles, el puntito, hemos hecho un viaje por nuestros sentidos y nuestro cuerpo.
A las educadoras les invitamos a imitar, con vuestros alumnos, una experiencia realizada en la escuela infantil El Alba de Madrid: la puesta en escena de este cuento con una simple sábana blanca y un proyector de trasnparencias. El resultado es fantástico. ¡Seguro que se atreven! ¡Les invitamos a enviarnos vuestras experiencia a nuestro correo: familialectora@gmail.com!
muy bonito el cuento, mas aun como lo fueron representando en la ¨pantalla grande¨ muy buen ejemplo para aprender a dibujar el rostro y el cuerpo humano tal cual es este cuento, muy bonito de verdad me gusto muchisimo. y a mi hija igual.
ResponderEliminarCada noche le leo un cuento para que se duerma y se relaja.Felicidades por hacer este maravilloso trabajo.
Muchas Gracias por tu comentario Maritza, y felicitaciones a ti y tu familia por sumarse a esta "Familia lectora", leyendo un cuento, cada noche, a tu hija.
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